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Notas Breves en español

No permita que el agua de los aspersores para crear la escorrentía desde el césped.

Airear los suelos pesados para mejorar su césped.

Verifique la salida de los aspersores con una “prueba de la lata”.

Es importante poner atención al sistema de riego para mantener un césped atractivo y saludable y al mismo tiempo, proteger el medio ambiente. Regarlo incorrectamente es la razón número uno por la que el césped se seca o se muere y por la que se produce escurrimiento de agua en zonas urbanas. El escurrimiento de agua puede arrastrar fertilizantes, pesticidas, y otros químicos peligrosos a las alcantarillas y vías fluviales.

Tomar en cuenta el riego al crear su jardín.

• Evite plantar un césped que requiera riego frecuente, como el bluegrass o ryegrass.
• Diseñe su jardín de tal forma que evite que el agua se escurra hacia superficies duras y alcantarillas.
• Para reducir el escurrimiento, instale, junto a las banquetas o en las pendientes, áreas que no necesiten riego y que incluyan componentes permeables o plantas que no requieran mucha agua.
• Airee la tierra compacta o dura para que el agua pueda penetrar fácilmente y llegar hasta las raíces del césped.
• Instale un sistema de irrigación que pueda ajustar a las diferentes necesidades de agua de cada parte de su jardín.

Riegue solamente cuando su césped lo necesite.

• La necesidad de agua varía de acuerdo con el tipo de césped, localidad y el mes del año.
• La mayoría de los céspedes necesitan agua cuando las dos pulgadas del suelo más cercanas a la superficie están secas. Use un objeto como un destornillador para introducir en la tierra y medir la profundidad de la humedad.
• Las áreas sombreadas y soleadas y los distintos tipos de suelo tendrán necesidades diferentes de riego.
• Lo mejor para la mayoría de céspedes es un riego intenso, pero menos frecuente. Riegue de dos a tres veces a la semana.
• Revise su sistema de aspersores para asegurarse que no produzcan escurrimiento, sobre todo en las pendientes. Si hay escurrimiento, reduzca el tiempo de riego y repita el ciclo para permitir que el agua se absorba por completo.
• Riegue por las mañanas cuando la evaporación y el viento son mínimos.
• Ajuste su horario de riego de acuerdo con la temporada y apague el sistema de irrigación si llueve.

Dele mantenimiento a su sistema de riego.

• Verifique con regularidad que no haya fugas, aspersores rotos o mal dirigidos, válvulas defectuosas y otros problemas. Ajuste los aspersores para evitar que rieguen las entradas a la cochera, banquetas y calles.
• Mejore su sistema de irrigación con accesorios como cabezas de rotor, controladores “inteligentes,” y sensores de humedad del suelo.
• Use la “prueba de la lata” para saber qué tan parejo riega su sistema de irrigación en diferentes áreas del césped y para calcular durante cuánto tiempo debe regar.

Reduzca al mínimo el uso de pesticidas que contaminan nuestros canales. Utilice alternativas sin químicas o productos pesticidas menos tóxicos siempre que sea posible. Lea las etiquetas de los productos cuidadosamente y siga las instrucciones sobre el uso, almacenaje y desecho correcto.